Los padres de David recibieron, al igual que los padres de las personas asistidas en los centros de autismo CERAC-APAFAFACC-ASEPAC, de la Garriga, un escrito con fecha 13 de junio de 1991 y redactado en estos términos:
"Estimados padres:
El colectivo de educadores de CERAC-APAFACC-ASEPAC, hemos sentido la necesidad de informarles de tota una serie de circunstancias que se están produciendo en nuestro/vuestro Centro.
Atendido que desconocemos vuestro nivel de información al respecto, y para evitar posibles versiones "inexactas" os hemos hecho una pequeña muestra de nuestra situación.
Sin embargo, antes de iniciar esta explicación, consideramos importante dejar claro que sabemos, que los principales protagonistas, son los propios alumnos, es decir, vuestros hijos, y es por ellos y para su mejoría, que los educadores estamos trabajando día tras día. Hemos escogido nuestra profesión, y nadie tendría que dudar de nuestra dedicación e interés hacia ellos.
Pero tampoco queremos caer en la demagogia, como los representantes y dirigentes de este Centro, que con el nombre de los niños como bandera, cometen muchas irregularidades e injusticias con el personal que ha trabajado y trabaja en el Centro. Y en ningún momento, han estado los niños, los beneficiarios.
Así pues, podréis comprobar que algunas de nuestras quejas, son de carácter estrictamente laboral, y otras, de aspecto pedagógico. Pero creemos que la solución de todas ellas es necesaria, y serán los propios niños los verdaderos beneficiarios.
Las peticiones de carácter laboral, hacen referencia a las condiciones mínimas por un trabajo realizado dignamente, recogidas y contempladas todas ellas en el Estatuto de los Trabajadores y en el propio Convenio vigente.
Diremos que en un principio, intentamos llegar a un acuerdo entre la directiva y el colectivo de profesionales a través de la vía del diálogo, pero el resultado fue nulo.
Así, pues, seguidamente, os enumeramos algunas de las razones que nos han obligado a tomar esta medida de denunciar las irregularidades a las autoridades competentes:
* La contínua desaparición del personal terapéutico que atiende las necesidades educativas de los niños. Personal que ha demostrado su profesionalidad y valía, y que en cualquier caso, han sido despedidos por promover movimientos sindicales, por razones de tipo personal de la dirección, o en beneficio económico de la empresa, pero nunca en beneficio de los propios niños.
* De una plantilla de aproximadamente 40 trabajadores, todos estamos en contrato temporal, incluso aquellos que llevan más de tres años trabajando. Solamente tienen contrato fijo, los que ocupan cargos directivos y un profesor, del total de la plantilla.
* Los trabajadores de la escuela, hacemos media hora de más cada semana, sin estar compensada de ninguna manera.
*Los trabajadores de la Residencia, no tenemos calendario laboral. Es decir, desconocemos que días trabajaremos los fines de semana y que día tendremos fiesta o vacaciones, hasta pocos días antes. De manera que nos resulta imposible hacer cualquier clase de previsión o distribución para disfrutar de nuestro tiempo libre.
Los turnos de fin de semana no se ajustan a lo que establece el Convenio. Cada trabajador tendría que trabajar un sábado y un domingo de cada mes. La realidad es que la empresa nos obliga a trabajar todos los fines de semana, colocándonos las fiestas a su pura conveniencia y otorgándonoslas de manera "graciable".
Por la noche, es parte del personal que ha trabajado durante el día, que ha de quedarse a dormir a petición de la empresa, sin que conste específicamente en su contrato laboral. Algunas personas (3) reciben una compensación económica (plus voluntario), y los restantes no reciben ninguna retribución ni compensación.
De las razones de carácter pedagógico y profesional, básicamente denunciamos la inexistencia de un espacio de diálogo, que tendría que ser propiciado por la dirección del propio Centro. En realidad sucede que, los educadores hemos de actuar según unas consignas trazadas desde instancias jerárquicamente más elevadas, pero no profesionalmente a la altura necesaria y muchas veces ajenas a la preparación científica que se requiere.
Podríamos enumerar miles de ejemplos que reflejan esta situación.
* No recibimos, como profesionales ningún tipo de información ni posibilidades de reciclaje de carácter formativo (las sesiones clínicas no cubren totalmente esta función, y en cualquier caso, por horarios de trabajo, no todos podemos asistir)
*No participamos en las decisiones de la empresa (ejemplo: Colonias...) que nos afectan a todos, padres, maestros y alumnos.
*En la escuela, no realizamos Clautros de profesores, para exponer, discutir posibles problemas y participar colectivamente en su resolución, como contempla la normativa vigente.
* Se realizan cambios y rotaciones de niños i maestros de manera impuesta e improvisada, sin responder a criterios pedagógicos, sino a otros de tipo circunstancial.
* Existe diferencia en las pautas de tratamiento y orientaciones terapéuticas, de un mismo niño, según sea de la residencia, Escuela o Terlab, circunstancia con la que estamos en total desacuerdo.
* Hay una nula o escasa participación de los educadores en las pautas y orientaciones del tratamiento psicopedagógico de los niños.
* Hay censura en la comunicación padres - profesores.
En Terlab, hay diversos casos en que en las libretas (de comunicaciones con los padres) no las escribe el profesor que ha estado con el niño durante todo el día, sino que lo hace el coordinador de los Talleres, que en la mayoría de ocasiones no consulta con los profesores, ni lee nuestros registros.
En la escuela, si bien somos los maestros los que escribimos las libretas ( de comunicación con los padres), estas han de pasar todas por la supervisión de la dirección, teniendo, en ocasiones, que cambiar un texto.
En la Residencia, la comunicación padres - educadores, brilla por su ausencia, y en las pocas ocasiones que tienen lugar, se nos dice el mensaje que hemos de transmitir a los padres.
...
Este ha sido un resumen de algunas de las muchas circunstancias que han provocado nuestras actuaciones.
Con todo, somos muy conscientes de que estamos trabajando con vuestros hijos, y en ningún caso tomaremos ninguna medida que pueda afectarlos en ningún sentido. Sino todo lo contrario.
En todo caso, no se trata que nosotros, como profesionales, pensemos tener la respuesta correcta a todos los problemas. Más bien creemos sinceramente en el DIÁLOGO i la PARTICIPACIÓN de TODAS las partes implicadas en el proceso educativo de los niños. Y así os lo queremos hacer saber.
Y por esto, estamos y estaremos siempre dispuestos y abiertos a reunirnos con todos vosotros, ya que como padres, sois parte implicada en este conflicto, y pensamos que tenéis todo el derecho a exigir la información que creáis conveniente.
Por último, volver a recordaros que es nuestro compromiso humano hacia vuestros hijos, lo que hace que nos expresemos de esta manera, lejos de toda posición demagógica ( de la que sin duda seremos acusados) y con la intención de favorecer un diálogo obviamente necesario, entre todos aquellos que, por una razón u otra, tenemos relación con su mundo.
Os agradecemos por anticipado la atención recibida
El colectivo de profesores de:
CERAC- APAFACC -ASEPAC"
Los padres de David hicieron llegar copia de esta carta, mediante los correspondientes Registros de Entrada de cada Departamento, a: Muy Hble. Sr. Jordi Pujol Soley, Presidente de la Generalidad de Cataluña; Hble. Sr. Josep Laporte Salas, Consejero de Enseñanza;Sr. Ramón Martínez Callén, Director General de Gestión del Profesorado y Centros Docentes; Sr. Josep Mª Refusta Palau, Jefe de los Servicios Territoriales (Barcelona-II).Comarcas; Hble. Sr. Antoni Comas Baldellou, Consejero de Bienestar Social;Sr. Ramón Vayreda Casaponsa, Jefe de los Servicios de Ordenación, Evaluación e Inspección , de la Dirección General de Asuntos Sociales, y Sra. Angels Miquel Anglarill, Directora General de Asuntos Sociales.
A todos ellos se les decía que "Como podemos demostrar documentalmente, la mayoría de estas situaciones ya hace tiempo que nosotros las habíamos puesto en conocimiento de los Departamentos de Enseñanza y Bienestar Social.
Pîenso que ya es llegado el momento de que se tomen las medidas necesarias para poner fin a las actuaciones prepotentes y dictatoriales del titular de estas entidades, Sr. Joan Roca Miralles, atendida la dimensión que toma la situación.
Si tienen necesidad de comprobar la autenticidad de estas denuncias, me lo hacen saber con el fin de ponerme en contacto con este colectivo de educadores, que designarían a un representante que acudiría a su Departamento, y con carácter confidencial, reconocer el citado escrito.
Espero comprenda el procedimiento, en evitación de represalias, que sufrirían estos profesionales si el titular de estas entidades conocieran la identidad de los que suscriben el documento."
Los padres de David tuvieron respuesta del Sr. Ramón Martínez Callén, que días más tarde se entrevistó con dos de estos profesores, portadores de un documento de autorización suscrito por los restantes miembros del colectivo que lo redactaron, acreditando su representación.
Déu n'hi dó, tenir que treballar en aquestes condicions. La culpa, però, és de l'Administració, que els dona molts diners i despres no té cura de vetllar pel correcte ús que es fa d'aquests diners, que surten de la butxaca de tots els ciutadans. Tens molta raó Joan quan parles de l'amiguisme i l'estrafolleria entre Administració i aquests Centres. ¡Quina vergonya!
ResponderEliminarTengo curiosidad de saber si los padres respondieron a esta carta de los maestros y si lograron que se les mejorara sus condiciones de trabajo.
ResponderEliminarPor las noticias que me llegaron en aquellas fechas, parece ser que no, Antonio. Sabían que habían expulsado a mi hijo David precismaente, entre otras cosas, por exigir transparencia de gestión, que jamás la hubo, y lo que si hicoern fue remitirme una carta muy dura, que luego publicaron en el periódico, pero que yo contesté con mayor dureza si cabe, harto hasta las mismas narices de manipulaciones, falsedades y mentidas. Las personas cobardes, nunca te vienen de cara, y si te ven, se esconden simulando no haberte visto . Pero los cobardes, en grupo, intentan proyectar la sensación de que son muy valientes.
ResponderEliminarLo veréis en los dos próximos posts.